El mail de hoy lo vuelvo a hacer con prisa.
Si la excusa del último fue que era mi cumpleaños atómico, la excusa de hoy es el cumpleaños de la hija atómica.
Y como los padres del siglo XXI somos unos blandengues que carecemos de referentes very mucho machos como El Fary, pues encima hacemos cumpleaños que podrían ser perfectamente bodas gitanas.
O bodas polacas.
Una vez estuve en una boda polaca y me acuerdo de muy poco. Recuerdo un brebaje que era puto veneno llamado bimber y algo de desaparecer dentro de un seto. Bueno, de lo del seto no me acuerdo, que me lo han contado.
Lo que sí sé es que duró tres días.
Los fastos de la hija atómica van a durar dos.
Y bien está que así sea, porque uno no sabe el tiempo que le queda aquí y hay que disfrutarlo. Que no es por ella, que es por nosotros, vaya.
A lo que iba, que el mail de hoy va con prisas y por lo tanto seguramente sea largo.
Y que mi intención de hoy es que seas capaz de visualizar la inmensidad de lo que tenemos encima con la IA.
No que se nos viene, no. Lo que TENEMOS. YA.
Que esto no es una revolución tecnológica como otras que hemos tenido.
No ha habido NUNCA en nuestra historia reciente de los últimos 200 mil años una revolución tecnológica como ésta.
Ni
por
asomo.
Al lío.
Pero antes… un pequeño glosario de mierda.
Un pequeño glosario de mierda
GPT: General Purpose Technology. Tecnología de propósito general. Son tecnologías que tienen la capacidad de cambiar absolutamente todo. Y que, como efecto secundario, cambian (para bien y para mal) nuestra forma de vivir.
El fuego 🔥, la electricidad ⚡️ e internet 🛜 son tecnologías de propósito general.
El lavavajillas 🍽️, los clips 🖇️ y los vibradores 💋 no son tecnologías de propósito general.
No hay que confundir este GPT con los Generative Pretrained Transformer, que también se abrevian GPT. Estos son la tecnología que hace que los LLMs sean lo que son.
Así que en lugar de decir GPT para hablar de tecnología de propósito general, hablaré de TPG.
TPG: Tecnología de propósito general. Es lo mismo que lo de antes, pero con las siglas cambiadas. Porque ¿qué puto sentido tiene que dos cosas diferentes se llamen igual? A ver, que pasa en todos los lados.
Por ejemplo, en música la palabra “do” puede referirse a una nota musical, un acorde o una escala.
También puede ser trato de varón, aunque en mi cabeza siempre fue “extracto de varón”. Tampoco es que empeorara demasiado este sinsentido de frase.
(Joder que me lío, ya te avisé de que hoy iba con prisas)
Lento: Que va despacio. Como cuando vas a 60 km/h por la autopista.
Rápido: Que vas a toda hostia. Como cuando circulas a 60 km/h por una calle peatonal llena de gente.
El fuego, la máquina de vapor, la electricidad, el ordenador personal, internet, el móvil…
Todas estas tecnologías tienen una cosa en común.
Son tecnologías de propósito general. Afectan a todos los sectores de la economía y a todos los aspectos de la vida.
Como tener un hijo.
Yo qué sé. Imagina que un día se va la luz y nos tiramos un día entero sin electricidad.
Por imaginar cosas, digo.
La vida se volvería rara… No digo diferente, digo rara. Porque la electricidad ha cambiado nuestra forma de enfrentarnos al mundo de tal forma que sin ella nos cuesta vivir.
Pues eso. Que las tecnologías de propósito general nos cambian la vida.
Pero además todas tienen otra característica en común.
Fueron de adopción lenta.
MUY lenta.
🔥 El fuego tardó en dominarse unos cuantos miles de años
💨 La máquina de vapor tardó 120 años
⚡️La electricidad 43 años
🛜 Internet 50 años
Esto implicaba que, de una forma u otra, la sociedad se iba adaptando poco a poco a los cambios disruptivos que traían consigo estas tecnologías.
Si tu trabajo consistía en transportar mercancías en carreta y aparecía la máquina de vapor, tenías unos cien años de margen.
Daba tiempo a que un negocio familiar fuera transitando a lo largo de varias generaciones.
Podrías hacerte relojero, yo qué sé.
Igual algún día hablo de lo que supuso el ferrocarril para nuestro concepto del tiempo. Es flipante.
Qué hostias… como hoy voy con prisas y no puedo detenerme mucho a pensar si tiene sentido o no lo que voy a contar, pues te lo cuento y listos.
Mira, resulta que antes del ferrocarril nuestros horarios eran… pues de aquella manera. Laxos. Como cuando quedas a mediodía y alguien aparece a las 14.00.
Las dos Españas son esto: la gente que entiende que mediodía son las 12.00 del medio día, como su nombre bien indica. Y la gente que entiende que la vida es pura arbitrariedad y le gustaría ver el mundo arder. Gente que llama a la tortilla de patata con cebolla “tortilla de patata”, ya sabes…
Bueno, pues eso. Que en esa época los horarios eran de aquella manera.
Las horas eran del tipo “al levantarse”, “antes de que anochezca” o “la primera luz del quinto día, al alba”. Que está bien si en tu pueblo más o menos seguís las mismas rutinas, pero un sindiós si te tienes que sincronizar con el pueblo de al lado. Esos bárbaros que cenan después de anochecer en lugar de antes.
Pues más o menos así parece que funcionaban las cosas en su día.
Como lo de “pues nos vamos a ir yendo”.
Total, que el ferrocarril obligó a adoptar un sistema objetivo que nos permitiera sincronizarnos unos con otros. Que “después de que el gallo cante por tercera vez” no parece la forma más sensata de saber a qué hora pasa el tren.
Y así, gracias a la máquina de vapor, terminas llegando tarde a todas las reuniones que te ponen en el trabajo. Porque las 8:30 de la mañana son las 8:30 de la mañana en tu pueblo y en el de al lado.
Y en ambos pueblos es una hora de MUY mal gusto para que te pongan una reunión.
Los viernes a las 16:00 es incluso peor.
Resumiendo. La máquina de vapor es un ejemplo perfecto de cómo una tecnología de propósito general nos cambia aspectos tan profundos y transversales como nuestra forma de medir el tiempo… sin que estuviera diseñada para ello.
Y a nada que nos detengamos a reflexionar sobre los cambios que produjeron el fuego, el ordenador personal o internet, pues llegaremos a conclusiones similares.
Total, que las TPG nos cambian la vida pero al menos lo hacen a un ritmo al que podemos adaptarnos.
Hasta que llegó el 30 de noviembre de 2022.
Esta es la fecha en la que salió ChatGPT.
Al cabo de cinco días OpenAI calculaba que tenía un millón de usuarios.
Dos meses después, ya contaba con 100 millones de usuarios.
Nunca antes en nuestra historia había pasado esto.
Insisto.
Nunca antes.
Jamás de los jamases.
Never gonna give you up.
A estas alturas deberías intuir que la IA es una tecnología de propósito general.
Aunque solo sea porque si no, a santo de qué iba yo a estar soltando este ladrillo.
Pero a diferencia de las tecnologías de propósito general anteriores, resulta que la IA es una tecnología de propósito general de adopción rápida.
La primera que tenemos en toda nuestra historia.
(ahora voy a dejar unas cuantas líneas en blanco para enfatizar lo que acabas de leer y que impregne bien tu psique)
La primera tecnología de propósito general de adopción rápida en toda nuestra historia.
What a time to be alive.
O no, yo qué sé. Uno empieza a estar cansado de vivir momentos históricos. A mí dame momentos normales.
Dame políticos aburridos.
Dame películas de superhéroes.
Dame champions del Madrid.
El caso es que te preguntarás, ¿y por qué ha sido la primera TPG de adopción rápida?
–Oye, notas atómico… ¿acaso habrá alguna razón que explique por qué la IA es una tecnología de propósito general de adopción rápida en lugar de ser lenta como las otras?
–Vaya movida, me pregunto qué tendrá de diferente la IA para que su adopción haya sido tan rápida
–Llevo diez minutos sentado en el váter y se me están durmiendo las piernas ¿Falta mucho?
Pues mira, la respuesta básica es que, o bien estas TPG necesitaban de otras tecnologías para su adopción masiva, o bien estaban en un estado muy incipiente y no terminaba de funcionar suficientemente bien.
Unos ejemplos.
La máquina de vapor: 120 años para cambiar el mundo
Aunque no hay una fecha estricta para su invención, asumamos que el punto de partida fue la máquina de Thomas Newcomen en 1712, porque por algún lado hay que empezar.
Luego llegó James Watt y en 1769 la perfeccionó, y unos 50 años más tarde llegó la revolución industrial donde se adoptó de forma masiva.
¿Por qué tardó tanto? Porque costaba una pasta, explotaba constantemente (literal), y solo los ricos podían permitírsela.
Como los primeros Tesla, vaya.
La electricidad: 43 años para que Edison iluminara medio mundo
Edison inventó patentó la bombilla en 1879 1880 y creó la primera red comercial en 1882, pero se calcula que hasta la década de 1920 (40 años más tarde) no se consiguió llegar al 50% de los hogares.
Construir la primera estación eléctrica costó $300.000. En dinero de hoy: 6 millones de dólares.
Para iluminar solo una milla cuadrada de Manhattan.
La historia de General Electric, Edison y Tesla también es para contarla. Pero ésa sí que es una historia para otro día.
El ordenador: 49 años para conocer a Guybrush Threepwood
El primer ordenador se inventó entre 1943 y 1945.
Los primeros ordenadores requerían equipos de especialistas, salas refrigeradas del tamaño de un gimnasio, y conocimiento que solo tenían unas pocas universidades.
Luego llegó el primer PC accesible para el público general, el IBM PC 5150, en 1981.
The secret of Monkey Island, la mejor y más grande aventura gráfica de todos los tiempos, se lanzó en octubre de 1990, hito que merecería su propio calendario.
El ordenador personal se inventó para poder jugarlo.
La historia del ordenador personal debería comenzar aquí.
Internet: 25 años desde ARPANET hasta memes de gatos
ARPANET se fundó en 1969 pero hasta que no hubo ordenadores personales comercializados de forma masiva y apareció una nueva tecnología llamada “navegador web”, no fue posible la adopción de Internet.
25 años.
Y aún queda gente que hace doble clic al pulsar en los enlaces de internet.
Total.
Que la máquina de vapor tuvo que perfeccionarse para no explotar y requería mucha infraestructura.
Que la electricidad tuvo que construir cables, plantas y demás infraestructura desde cero
Internet tuvo que crear redes digitales completas y tirar cables submarinos por los océanos
La IA en cambio se encontró las “tuberías” ya construidas (smartphones, internet, nube)
La IA solo tuvo que “abrir el grifo”.
No tuvo que convencerte de que te compraras un aparato nuevo. Ya lo tenías en el bolsillo desde hacía 10 años.
Lo único que hacía falta para que tú y yo usáramos esta tecnología era saber hablar y tener internet.
Por primera vez en la historia, una revolución tecnológica no tuvo que esperar a que se construyera su infraestructura. Ya estaba lista.
Es como si hubieran inventado el coche justo cuando acababan de terminar de asfaltar todas las carreteras del mundo. Y de paso ya tenían las gasolineras, los mecánicos y hasta el seguro a terceros.
La polla.
Y todo esto es importante porque todavía no somos conscientes de cómo va a afectar esto a nuestras vidas.
No tenemos ni idea.
Algunos comenzamos a sospecharlo. Desde lejos.
La buena noticia es que nos va a afectar a todos. Nadie va a estar a salvo igual que nadie se libró de los cambios que trajeron consigo la máquina de vapor, la electricidad o internet.
La mala es que no tenemos décadas para ver por dónde van los tiros… que ya se han disparado.
Adaptarse o morir.
O hacerte funcionario.
Lo bueno de haber estado metido en esto desde hace dos años y medio es que ya no me genera ansiedad no poder seguirle el ritmo.
Ahora simplemente me relajo y me dejo llevar. Como en las duchas de las cárceles.
He aceptado que la ola me va a coger.
La pregunta no es cuándo me va a coger. La pregunta es cómo de preparado voy a estar cuando me coja. Porque cogerme, me va a coger.
Insisto. Como en la cárcel.
Durante siglos, las revoluciones tecnológicas nos dieron décadas para adaptarnos. Tiempo para que los abuelos se quejaran de que “antes esto no pasaba”. Tiempo para que los políticos se inventaran comisiones parlamentarias para estudiar el tema durante años sin hacer nada. Tiempo para que las empresas reorganizaran sus procesos poco a poco.
Esta vez tenemos meses en el mejor de los casos.
No años. Meses.
Si no semanas o días.
Hay un chiste que utilizamos mucho en nuestra empresa para ilustrar esto.
Van dos excursionistas por el monte y de repente ven a un oso que se les acerca.
Uno de ellos se para, saca las zapatillas de su mochila y se las empieza a poner.
El otro le dice:
–¿Pero qué haces? Si el oso corre mucho más que tú.
Y el otro le responde
–Ya. Es que no tengo que correr más que el oso. Tengo que correr más que TÚ
Al otro excursionista no lo ves porque es el que está haciendo la foto.
Y se supone que en 4-5 años llegan los robots humanoides.
Robots de propósito general.
Pues eso. Ahí lo dejo.
Un abrazo, el Notas Atómico ⚛️
La IA es una tecnología de propósito general de adopción rápida
Todas las revoluciones tecnológicas anteriores tardaron décadas en transformar la sociedad. La IA lo ha empezado a hacer en cuestión de meses, no por ser "mejor", sino por construirse sobre infraestructura digital ya existente.
Esto nos deja menos tiempo para adaptarnos, pero también una oportunidad única de adaptarnos más rápido que la competencia.
PD: Si has llegado hasta aquí es porque te interesa el tema o porque tienes mucho tiempo libre. En cualquier caso, reenvíaselo a alguien que creas que debería leerlo. Especialmente si esa persona sigue pensando que la IA es una moda pasajera. Como eso de Internet o de los videojuegos.
PD2: Si te han reenviado este correo y te ha gustado te puedes suscribir en https://notas-atomicas.com.
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PD5: No. Acabo de intentar venderte algo. La diferencia es sutil pero muy importante.
PD6: –No me he suscrito para que me vendan cosas
PD7: Te puedes desuscribir al final del correo
PD8: –No estoy suscrito
PD9: Pues suscríbete y luego te desuscribes, yo qué sé. Además, estas postdatas son mías, no sé qué haces aquí llorando.
PD10: –Perdón. Yo sólo pasaba por aquí a preguntar por los resultados de la encuesta atómica
PD11: ¡Ah! La encuesta atómica…
Pues mi idea es compartirte los resultados a lo largo de la semana que viene. Ésta ya sabes que ando pillado. Mientras tanto, sí que te avanzo que lo que me estáis pidiendo es que continúe con la IA y que no echáis de menos NADA a Cialdini.
Pobre Cialdini…
Si no estás de acuerdo todavía puedes dedicar 10 segundos a insultar, agradecer o preguntar cosas aquí